Es uno de los grandes parques situados en Londres. Está amurallado y tiene más de 4.000 árboles. Allí se puede pasear, hacer deporte o incluso comer o merendar tumbados en la hierba.
A lo largo del recorrido hay varios monumentos para hacerse fotos: la estatua de Peter Pan o la fuente en memoria de la Princesa Diana, que es un lugar de reflexión donde la gente camina descalza dentro del agua. La siguiente foto marca, con un cuadrado negro, los principales lugares que hay que visitar:
En el centro del parque se encuentra el lago artificial Serpentine (donde se realizaron pruebas de natación en las pasadas olimpiadas).
Está prohibido que se metan los perros en el agua... pero la gente los mete igual aprovechando los días de calor. Es típico ver perros nadando entre patos :)
Se tarda bastante en recorrer todo el parque. Para hacernos una idea, la siguiente foto muestra una pequeña parte del recorrido:
Más datos curiosos: ¡hay ardillas por todas partes! ¡y se acercan a la gente que les da de comer!
También es típico sentarse en unas sillas de tela muy cómodas que hay por todo el parque. Merece la pena probarlas y aprovechar para sacar fotos :) Las vistas son muy bonitas.
El Hyde Park es una visita que hay que hacer sí o sí. Nosotros tuvimos muy buen tiempo y nos gustó mucho. Como anécdota debo comentar que me llamó mucho la atención ver a tanta gente vestida con ropa de deporte corriendo con los carricoches de sus bebés, ¡parecía sacado de una película!